Carreras para ratones de biblioteca: Cómo convertir tu amor por la literatura en un medio de vida
Para algunos la lectura es un ávido pasatiempo. Pero, ¿y si pudieras convertir esa afición en una verdadera carrera? Aquí tienes algunas lecturas útiles para convertir tu amor por los libros en un trabajo remunerado.
Profesor de inglés
Quizá la carrera más obvia para dedicarse a la literatura sea la de profesor de literatura propiamente dicha. Esto puede suponer cualquier cosa, desde ser profesor de inglés en un instituto hasta profesor universitario de inglés. En la actualidad existen múltiples métodos para acceder a la enseñanza. La vía tradicional consiste en obtener una licenciatura en inglés y luego adquirir experiencia en una escuela antes de entrar en la formación de profesores. Sin embargo, es posible que quieras ser simplemente un profesor particular, en cuyo caso la experiencia en la escuela puede no ser necesaria.
Bibliotecario
Ser bibliotecario te asegura estar siempre rodeado de libros. Mientras que las bibliotecas locales están disminuyendo, las universitarias están en constante expansión. Las bibliotecas también se adaptan a la era digital y una nueva rama de estudio conocida como biblioteconomía se está haciendo popular. Las vacantes pueden ser difíciles de conseguir: lo mejor es que te presentes directamente a todas las que puedas y no busques exclusivamente en las listas de empleo.
Editor de textos editoriales
Los correctores se encargan de corregir los artículos antes de su publicación. Esto puede suponer la corrección de cualquier cosa, desde revistas hasta documentos legales o folletos. Los que tengan la suerte de entrar en el mundo de la edición de libros podrán trabajar corrigiendo libros de ficción y no ficción. Los correctores deben tener un buen ojo para los detalles y una perfecta aptitud para la ortografía y la gramática, ya que se encargan de corregir los errores gramaticales y ortográficos, modificar las partes en las que el estilo de la escritura puede diferir y resolver los aspectos legales potencialmente conflictivos con el escritor. Por lo general, es necesario tener un título de editor para conseguir trabajo en una editorial; después de varios años, es posible que se pueda trabajar por cuenta propia.
Agente literario
Los agentes literarios o los encargados de las relaciones públicas literarias se encargan de comercializar los libros. Pueden ayudar a ponerse en contacto con las editoriales, conseguir reseñas y organizar eventos literarios. Por lo general, se aconseja tener algún tipo de educación superior, aunque es posible que pueda demostrar su amor por la literatura lo suficiente como para conseguir un trabajo sin tales cualificaciones. Ser bastante extrovertido y tener facilidad para el marketing es tan importante en este puesto como el amor por los libros.
Propietario de una librería
Convertirse en propietario de una librería sólo requiere pasión y espíritu emprendedor. Te puede beneficiar tener experiencia en una librería antes como empleado, ya que te dará una mejor idea de cómo almacenar los libros y cuáles se venden. Ni siquiera hace falta que alquiles una tienda si crees que será un gasto excesivo: mucha gente ha creado negocios de compra y venta de libros por Internet. Como jefe, puedes elegir tu propio stock y fijar tus propios precios; además, puedes pedir prestado un libro gratis siempre que quieras.